Se realiza en ambientes en donde hay malestares, pesadillas, enojos, depresiones, o tensión constante.
También cuando se produce una serie de sucesos desgraciados o periodos de mala suerte en la misma familia. Este es un ritual muy eficaz y se puede hacer cualquier día, pero preferentemente un martes o un domingo.-
Elementos a utilizar
Una vela blanca
Incienso, mirra, salvia, romero, o ruda
Tres carbones (los consigues en cualquier santería)
Un incensarioUn bols con agua
Sal
- Encender la vela y relajarse lentamente, visualizando la energía negativa saliendo del cuerpo y del ambiente con cada espiracion para desaparecer luego de quemarse.
- Bendecir el agua, la sal, el incienso y los yuyos.
- Encender los carbones que sean necesarios (uno, dos o los tres, según la cantidad de incienso que vayas a utilizar, mas los yuyos). Colocarlos dentro del incensario y colocar encima el incienso, la mirra y los yuyos.
- Recorrer la casa con el incensario, (deteniéndose en cada rincón o esquinas de las habitaciones, que es donde se junta la energía negativa), visualizar como se expande una cierta luminosidad que envuelve la casa. Detenerse en cada puerta y ventana, del mismo modo
- Echar una pizca de sal en el bols con agua, y rociar cada rincón de la casa.
- Bendecir la casa.
- Volver hacia el lugar donde esta encendida la vela y vizualizar nuevamente la casa envuelta en una luz brillante radiante, revisando mentalmente si queda algún espacio oscuro o con cierta negatividad y envolverlo con dicha luz
- Dejar que la vela se consuma, y luego enterrar los restos con los del incienso y los carbones
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